SHIB fue creada en el año 2021, cuando la popularidad de Dogecoin y los memes de perritos explotó.
Shiba Inu es una de las principales memecoins a nivel de capitalización de mercado.
SHIB es caracterizada por sus cambios violentos de precio tanto a la baja como al alza.
Debido a que es mucho menos costosa que otras criptomonedas en el mercado, ha ganado la atención.
A pesar de su origen como meme, Shiba Inu ha sido continuamente desarrollada y mejorada.
Shiba Inu (SHIB) es una memecoin, término por el que se conoce a las criptomonedas basadas en memes o contenido viral en Internet. Se trata de un activo digital de código abierto y peer-to-peer que ha ganado popularidad entre los traders por sus marcados movimientos de precio.
Una de sus características fundamentales es que Shiba Inu, al igual que Dogecoin (DOGE), está inspirada en un famoso perro llamado Kabosu, que fue toda una estrella de Internet en los años 2000 y que inspiró muchos memes.
En el caso de SHIB, el creador de la criptomoneda — de seudónimo Ryoshi — y miembros desarrolladores de la criptomoneda han señalado que tiene predilección por la raza de perro de la que forma parte Kabosu, los Shiba Inu japoneses. Asimismo, Elon Musk, el fundador de Tesla y actual dueño de X, ha mostrado su interés por los memes de este estilo y las criptomonedas como SHIB.
¿Cómo se creó Shiba Inu (SHIB)?
Shiba Inu es una moneda joven, siendo creada en agosto de 2020 por un internauta que se hacía llamar Ryoshi. Este nombre de origen japonés se trataba de un seudónimo, ya que el creador de SHIB deseaba mantener un perfil bajo y no revelar su verdadera identidad.
Este comportamiento sería clave para el desarrollo de Shiba Inu y su ideología en general. Muy posiblemente inspirado en el mítico comportamiento del creador de Bitcoin que siempre mantuvo en privado su verdadera identidad, Ryoshi deseaba estar en segundo plano y no influir en el futuro de Shiba Inu.
Al respecto diría:
Soy un don nadie, no soy importante. Los esfuerzos por desenmascarar mi «identidad», incluso si tuvieran éxito, serían decepcionantes. Solo soy un tipo sin importancia que teclea en un teclado y soy reemplazable. Soy Ryoshi.
Fundador de Shiba Inu.
Bajo esta primicia, Ryoshi deseaba experimentar con la posibilidad de empezar un proyecto monetario de cero y con cero dinero en su bolsillo. Asimismo, planteaba que SHIB sería “un experimento de descentralización espontaneo construido por una comunidad”. Todas estas ideas las dejaría planteadas en un libro blanco, al cual llamó irónicamente woof paper (papel guao).
En este documento, Ryoshi señalaba que SHIB estaba inspirada en Dogecoin, la primera criptomoneda meme del mercado y la más exitosa. La intención era crear una alternativa a Dogecoin, que él llamó «Dogecoin Killer», con la esperanza de que SHIB superara a su predecesor en popularidad y uso. Un deseo que aún no ha podido cumplir, ya que DOGE sigue siendo la principal memecoin en cuanto a capitalización de mercado.
Con la teoría propuesta e intenciones de experimentar, SHIB fue lanzado como un token ERC-20 en la red Ethereum, lo que permitía su uso en una variedad de aplicaciones descentralizadas (dApps), exchanges descentralizados (DEX) y wallets compatibles con Ethereum. Asimismo, se definió que el suministro inicial de SHIB sería de mil billones de tokens.
La mitad de este suministro (500 billones de tokens) fue enviada a la wallet de Vitalik Buterin, cofundador de Ethereum, como una forma de descentralizar el control de la moneda. Buterin más tarde quemó el 90% de estos tokens y donó el resto a un fondo de ayuda en India por la pandemia de Covid. La otra mitad del suministro se bloqueó en Uniswap, un exchange descentralizado, para proporcionar liquidez y permitir el acceso de la comunidad al token desde el primer día.
Para mayo de 2022, Ryoshi decidió retirarse de manera pública, vendió los tokens que tenía en su poder y dejó el liderazgo en manos de otro desarrollador anónimo, Shytoshi Kusama. De aquí en más, SHIB ha ido creciendo de la mano de su comunidad, conocida como «ShibArmy». Estos miembros han jugado un papel crucial en el desarrollo y la popularidad del token, impulsado iniciativas como el desarrollo de proyectos basados en SHIB, la creación de NFTs, y la promoción del uso de la criptomoneda.
¿Cómo funciona Shiba Inu?
SHIB funciona como un token estándar ERC-20, lo que significa que opera en la red Ethereum. Esto lo diferencia de otras memecoins, como es el caso de DOGE, cuyos desarrolladores han creado una propia red y, por ende, poseen particularidades únicas sobre el algoritmo de consenso, la política monetaria e, incluso, otras funcionalidades financieras o de programación.
¿Qué es un ERC-20?
El estándar de token ERC-20 es el primero en la historia que permitió la creación de forma organizada de nuevas monedas fungibles en la red de Ethereum. Este código permite acuñar nuevos tokens con su suministro completo, distribuirlo a otras direcciones, intercambiarlo con otras monedas de la red y visualizar el balance de las direcciones.
En el caso de Shiba Inu, su modelo de procesamiento de transacciones, su algoritmo de consenso y códigos está totalmente basado en Ethereum, lo que le permite ser compatible con una amplia gama de carteras de criptomonedas, exchanges y aplicaciones descentralizadas (dApps). Aunque, a su vez, a nivel de innovación, no aporta nada nuevo al ecosistema de criptomonedas y limita su valor tecnológico.
¿Es SHIB una moneda minable?
No. SHIB es una criptomoneda que originalmente se creó sin un mecanismo de minería tradicional. En lugar de la minería, SHIB tiene un suministro limitado que se creó todo a la vez al momento de su lanzamiento. Como se trata de un token que hace vida en Ethereum, SHIB puede ser puesto en staking para ganar recompensas por el procesamiento de transacciones.
En cuanto a su funcionamiento y distribución, todo el ecosistema de Shiba Inu funciona con base en los contratos inteligentes de Ethereum, que se trata de programas autoejecutables que están detrás de la existencia de los ERC-20. Y es que, por medio de estos elementos, el proyecto Shiba Inu creó no solo una moneda SHIB, sino otras dos más que complementan su estructura monetaria.
Estamos hablando de LEASH y BONE, las hermanas del famoso token SHIB que cumplen funciones particulares en la economía de la memecoin. Por ejemplo, mientras SHIB se trata de la moneda principal, con un suministro variable y de uso como método de pago, el token LEASH se presentó como un activo de suministro limitado, con la capacidad de ser usado para acuñar NFTs y comprar terrenos en el metaverso.
BONE, por otro lado, es el token de gobernanza del ecosistema Shiba Inu. Tiene un suministro de 250 millones de tokens y se destina a permitir a la comunidad influir en el desarrollo futuro del proyecto a través de votaciones en DAO (Organización Autónoma Descentralizada). Y es que, tal y como se puede ver, Shiba Inu es un proyecto de memecoin con múltiples funcionalidades, incluyendo entre ellas su propio sistema de gobernanza conocido como Doggy DAO.
¿Qué es el Doggy DAO?
El Doggy DAO se trata de una Organización Autónoma Descentralizada que tiene como objetivo gobernar y supervisar aspectos clave del proyecto Shiba Inu. La Doggy DAO se divide en TRES partes, una para cada uno de los tokens principales del ecosistema Shiba Inu (SHIB, LEASH u BONE), y cada una de ellas es responsable de supervisar un aspecto específico del sistema para garantizar su continuidad.
La DAO está destinada a tomar decisiones importantes sobre el futuro y el desarrollo de la red, siendo su objetivo asegurar que la comunidad de Shiba Inu tenga un papel activo en la evolución de la plataforma.
Otra peculiaridad de la economía de Shiba Inu es que se trata de un proyecto que tiene contemplada la quema de tokens. Este proceso está diseñado para reducir el suministro circulante de la criptomoneda con el objetivo potencial de incrementar su valor a través de la escasez. Para ello, la quema de tokens implica enviar SHIB a direcciones de Ethereum que son inaccesibles.
Estas direcciones se denominan «direcciones de quema» o «billeteras muertas» porque las claves privadas asociadas a estas direcciones son desconocidas o destruidas, lo que hace imposible recuperar los tokens enviados allí.
Inicialmente, las quemas eran realizadas manualmente por la comunidad o por el equipo de Shiba Inu. Sin embargo, con el paso de los años se introdujo un nuevo elemento al ecosistema conocido como Shibarium, el cual agregó un mecanismo automático de quema. En Shibarium, una parte de las tarifas de transacción en BONE se convierte a SHIB y se envía automáticamente a direcciones de quema, proporcionando un método más constante y eficiente para reducir el suministro.
¿Qué es Shibarium?
Shibarium es una solución de segunda capa (Layer-2) para la blockchain de Ethereum que ha sido desarrollada por el equipo de Shiba Inu. El objetivo principal de esta solución es mejorar la escalabilidad de las transacciones de Shiba Inu al procesar transacciones fuera de la cadena principal de Ethereum (Layer-1). Asimismo, plantea la reducción significativa de las tarifas de transacción (gas fees) en comparación con las que se incurren en la red principal de Ethereum.
Adicional a su estructura monetaria y su DAO, Shiba Inu tiene otras peculiaridades en su funcionamiento. Por ejemplo, desde sus inicios, se planteó la creación de un exchange especializado en SHIB que permitiese a los interesados acceder a la moneda. Este tiene por nombre ShibaSwap y funciona como un exchange descentralizado (DEX), el cual permite comprar y vender los tokens de Shiba Inu y ofrece la posibilidad de realizar staking para generar ganancias con los tokens.
¿En qué se diferencia Shiba Inu de otras criptomonedas?
La principal diferencia de Shiba Inu con criptomonedas como bitcoin o ether, es que se trata de una memecoin. Este tipo de tokens son creados, tal y como comentamos anteriormente, con base en memes o contenido viral de internet. Por ende, se trata de activos que no tienen el objetivo de ser una propuesta seria de criptomoneda que aporte valor real a nivel económico, tecnológico o financiero.
En cuanto a sus pares memecoins, SHIB se diferencia de Dogecoin por no tener su propia red, formando parte del ecosistema de Ethereum como un token ERC-20. Asimismo, aunque posee un suministro masivo, no es una criptomoneda con unidades ilimitadas como si lo es DOGE y, además, implementa en sus prácticas monetarias la quema de tokens, lo que la ha convertido en un activo que busca la escasez.
Si la comparamos con otras memecoins famosas como PEPE, Shiba Inu es un proyecto que ha logrado plantear una mayor diversificación de sus herramientas y oportunidades financieras. En este sentido, la criptomoneda del perrito japonés tiene su propio exchange, múltiples tokens que interactúan entre sí, la capacidad de acuñar NFT y hasta posee una solución de segunda capa.
Si lo comparamos con proyectos como Ripple, Tether o hasta el mismo BNB, Shiba Inu resalta por su compromiso con la descentralización de la propiedad. Desde el principio, SHIB fue distribuido de manera que nadie tuviera control absoluto sobre el suministro, con la mitad enviada a Vitalik Buterin, quien luego quemó gran parte de este dinero y el resto lo donó. Asimismo, el fundador de esta memecoin, Ryoshi, decidió desaparecer de la palestra pública para no seguir influenciando el activo con su presencia.
¿Cómo puedo almacenar SHIB de forma segura?
Para almacenar Shiba Inu (SHIB), hay varias wallets que se consideran seguras, fáciles de usar y compatibles. Algunas de ellas son:
- Ledger Nano S/X: Son muy populares debido a su alta seguridad, ya que almacenan las claves privadas offline. Ambos modelos soportan SHIB y una amplia gama de otras criptomonedas.
- Trezor One/Model T: Otra excelente opción para la seguridad, Trezor es conocido por su robustez y soporte para tokens ERC-20 como SHIB.
- MetaMask: Es una de las billeteras más utilizadas para el ecosistema Ethereum y por ende para SHIB. Funciona como una extensión del navegador o aplicación móvil, ofreciendo una interfaz para interactuar con dApps y ShibaSwap.
- Trust Wallet: Apoyado por Binance, este es un wallet móvil que soporta una gran cantidad de criptomonedas, incluyendo SHIB. Es conocido por su facilidad de uso y seguridad.
- Atomic Wallet: Ofrece opciones para dispositivos móviles y de escritorio. Es una opción descentralizada para almacenar SHIB, con la capacidad de intercambio integrado y soporte para más de 300 criptomonedas.
¿Es seguro invertir en Shiba Inu (SHIB)?
Invertir en Shiba Inu (SHIB) entraña tanto oportunidades como riesgos significativos, típicos de las criptomonedas, pero más pronunciados debido a su naturaleza de memecoin. Es importante señalar que se trata de un activo que no tiene valor real basado en una red o una propuesta monetaria, pero que ha ganado popularidad y su precio ha subido debido al crecimiento de su comunidad y la especulación de los traders.
A nivel de puntos a favor como inversión, SHIB tiene una comunidad muy activa y un ecosistema en desarrollo con iniciativas como Shibarium, ShibaSwap (DEX), proyectos de NFT y metaverso. Esto puede proporcionar cierta seguridad a través de la utilidad y la participación comunitaria. Asimismo, los tokens ERC-20 como SHIB son auditables en Ethereum, lo que añade un nivel de transparencia y seguridad a las transacciones y suministro.
No obstante, existen ciertas particularidades que hay que tener en cuenta, la principal es que SHIB es extremadamente volátil. Su precio puede cambiar drásticamente en cuestión de minutos debido a especulación, noticias, tweets de figuras influyentes como Elon Musk o cambios en el mercado cripto en general.
De igual manera, aunque SHIB tiene un ecosistema en crecimiento, su utilidad práctica fuera de este ecosistema es limitada comparada con criptomonedas como Bitcoin o Ethereum. Adicional, la velocidad del desarrollo tecnológico de Shiba Inu ha sido criticada, sobre todo por la falta de actualizaciones significativas o una hoja de ruta clara podría impactar negativamente la confianza de los inversores.
En cuanto a los riesgos que corren todas las criptomonedas y las memecoins particularmente, hay que tomar en cuenta que estos activos enfrentan un entorno regulatorio incierto en muchos países. Cambios en la regulación pueden afectar negativamente el precio de SHIB o incluso su legalidad en ciertas jurisdicciones. También, este tipo de criptomonedas está expuesta a la seguridad de las plataformas donde hacen vida, como los exchanges y las wallets, donde las estafas, hackeos y phishing son vulnerabilidades reales y comunes.